Cuando piensas en casarte, la fecha de la boda es una de las cosas más importantes, ya que según la época se desarrollará como una boda de verano, primavera, invernal u otoñal. Es decir, determinará el traje de la novia, el lugar de celebración, el tipo de cocktail y cena, incluso el estilo de la boda.

Por eso, lograr tener la fecha que más nos gusta para nuestra boda es a veces tarea difícil. Ya que tenemos que coordinar la disponibilidad de la iglesia, del lugar de celebración, de la conveniencia para nuestros invitados entre otras muchas circunstancias.

Normalmente, las más solicitadas son las bodas estivales o de primavera, ya que son las que nos garantizan en principio, el buen tiempo y que la boda pueda ser más lucida. Pero últimamente, las bodas de otoño o invierno están tomando más auge, posiblemente por la falta de disponibilidad durante el buen tiempo. Otro buen motivo es porque la celebración durante esta época nos ofrece otras posibilidades, para lograr una boda elegante e inigualable.

Y dentro de estas fechas invernales, ¿qué hay más romántico que celebrar tu boda el día de los enamorados?

La boda el día de San Valentín, no sólo tiene la singularidad de coincidir con el día dedicado al amor, sino que creará entre los invitados un ambiente especialmente romántico y dará un toque original permitiendo, durante la celebración, hacer numerosas referencias a San Valentín.

¿De dónde viene el origen de San Valentín?

Según algunos teóricos, San Valentín fue un mártir que se negó a rechazar su fe cristiana. Algunas teorías, mucho más románticas, relatan que Valentín fue un cura que ejerció durante el reinado de Claudio III.

Durante su mandato Claudio III prohibió a los jóvenes contraer matrimonio. Valentín tachó esta medida como injusta y siguió casando a jóvenes en la clandestinidad, hasta que fue descubierto. Durante su encarcelamiento se enamoró de la hija del carcelero y antes de morir le dejó una carta, dando paso a la primera carta de amor de San Valentín.

De este modo fue que San Valentín se convirtió en el patrón del día de los enamorados y es por esta leyenda que el 14 de febrero, las parejas enamoradas se escriben relatos de amor y se regalan presentes para demostrarse el gran amor que se procesan.

¿Qué joyas nupciales puede lucir en una boda el 14 de febrero?

Celebrar tu boda el día de San Valentín te da un sinfín de opciones, desde los más bellos y tradicionales pendientes de novia a las pulseras Riviere de diamantes, pasando por collares, broches e incluso diamantes o tiaras.

Nuestros preciosos diseños de nuestra tienda online www.navasjoyerosboda.com seguro que combinan y complementan tu look de novia de forma excepcional y perfecta, para que seas la novia ideal el día de San Valentín.

Pendientes Ardnajela

Los pendientes de novia son la pieza nupcial, después de las alianzas de matrimonio, más importante de una boda. Por ello, si vas a contraer matrimonio el día de San Valentín te recomendamos estos románticos pendientes largos realizados en oro de Primera Ley y diamantes modelo ARDNAJELA. 

Pulsera Adana

Los pendientes de novia pueden ser combinados, sin sobrecargar el look nupcial, con una pulsera de diamantes. En este caso, para el día de San Valentín, te recomendamos  la pulsera de diamantes ADANA tipo riviere, su brillo y su delicadeza te convertirán en una toda una princesa.

Tiara Liria

Pero sin duda alguna, si lo nuestro es una boda romántica, tu pieza ideal es una tiara o diadema. Sin duda, una joya preciosa que pueda pasar de generación en generación y que completará tu look nupcial a las mil maravillas. La tiara LIRIA es una pieza de oro de Primera Ley y diamantes realmente preciosa.

Si quieres realizar tu boda en San Valentín y quieres lucir como toda una princesa, el día de los enamorado. Te recomendamos adquirir tu pieza en nuestra joyería online www.navasjoyeros.com al mejor precio.