Un vestido de novia ¿a todo color?

Que la novia vista de blanco el día de su boda es una práctica relativamente reciente. Las parejas que contraían matrimonio en la Edad Media lo hacían por contratos de intercambio o transmisión de propiedades. En la ceremonia, las novias llevaban un traje más o menos vistoso pero de cualquier color.

La ética cristiana marca que la novia lleve un vestido blanco como símbolo de virginidad y pureza. Pero la irrupción del blanco no se produjo hasta el siglo XIX en Inglaterra, donde la princesa Carlota, prima de la reina Victoria, llevaba dicho color durante su boda en 1816. Pero no fue hasta 1840, en la boda de la propia reina con su primo, el príncipe Alberto de Sajonia-Coburgo-Gotha, cuando la tradición empezó a cobrar verdadera fuerza. Eso se debió, principalmente, a la creciente masificación de los medios de comunicación impresos y la fotografía, contribuyendo a que millones de personas vieran que la novia iba vestida de blanco.

A partir de 1900, renace esta moda nupcial y a partir de los años 50 aparecen los trajes dedicados concretamente a las novias, con todo tipo de telas como el terciopelo, seda, tul, encaje o bordados.

Durante los años 70 el blanco sigue siendo el color predominante para las novias de medio mundo pero los diseñadores empiezan a combinar los diferentes tejidos como las transparencias con los tules o los drapeados con otro tipo de telas.

Las tendencias han ido cambiando y los grandes diseñadores nacionales e internacionales han agregado a los vestidos de novia una amplia gama de colorido. Todos sabemos que elegir el vestido de novia puede ser una tarea difícil, pero las nuevas tendencias incitan a las mujeres a atreverse con diferentes colores y desmarcarse de lo tradicional.

Son las novias más atrevidas las que han incorporado tonos rosas, rojos, azules y hasta violetas tanto en el vestido como en el resto de complementos del look nupcial. Escoger una tonalidad diferente también puede ayudar a la novia a elegir los colores de la decoración de la boda, generando un atractivo diferente al gran día.

Eso sí, todas la novias deben tener en cuenta que cada color tiene un significado y puede ser de utilidad conocer lo que transmiten antes de escoger como es el caso del blanco que es considerado símbolo de pureza, inocencia y espiritualidad; el rojo es el color de la fuerza, el amor, la energía y la pasión; los violetas que son los encargados de intercambiar las energías negativas por las positivas; las tonalidades azules representan la fidelidad, la paz y la intuición; el amarillo es el color de la inteligencia y los grises, hoy en día muy utilizados en el look nupcial de la novia, un color neutral que demuestra madurez y equilibrio.

Las novias más clásicas siguen decantándose por el color blanco para su vestido, sin embargo, las hay también que se inclinan por otros colores dentro de la misma tonalidad como el pastel, marfil o crudo, así como el champagne o beige.

Para determinar que tono de vestido sentará mejor a cada novia, existe una guía que lo determina según el color de piel como por ejemplo, si tienes la piel muy blanca tu mejor opción es un vestido de novia en color marfil, pero mejor no utilizar un blanco demasiado brillante porque podrías lucir muy pálida. Pero por el contrario, si el tipo de piel es morena, casi todos los tonos de blanco te sentarán de maravilla.

Además, si estas pensando dar un toque de color al look nupcial las joyas en las bodas son elementos importantes tanto como el vestido de novia o el traje del novio, puesto son el complemento que da luminosidad y realza la belleza de los contrayentes y sus invitados más destacados.

Para la gran protagonista del día, la novia, la colección de joyas para bodas de Navas Joyeros Boda, le ofrece diseños muy variados de joyas de diamantes y perlas para que encuentre el que más se adapta a su look nupcial, por lo que además de las clásicas joyas de boda encontrarás piezas de joyería a todo color para nuestras novias más atrevidas.

Como es el caso del colgante de diamantes Modena es un espectacular diseño de colgante en forma de flor, cuya belleza reside en la combinación de diamantes negros y blancos. Su presencia hace que sea una joya perfecta para utilizar el día de tu boda.

MODENA

O de los pendientes Corcega son unos estupendos pendientes con coral, con un cuidado diseño y alta calidad, formados por diamantes y oro de 18 quilates. Estos pendientes largos son una elección perfecta para todas aquellas mujeres o novias que quieran sentirse elegantes y únicas en un día tan señalado.

CORCEGA

El anillo Modelo Desdémona es una elegante sortija de oro blanco con diamantes de talle baguett y una amatista central espectacular, ideal como anillo de compromiso, con un toque exclusivo o como sortija de boda.

DESDEMONA

La sortija India es una preciosa pieza de trilogy, donde se mezcla el enigmático zafiro amarillo y el brillo de los diamantes seleccionados por su calidad, creando una pieza excepcional que hará las delicias de las novias más atrevidas.

INDIA

En definitiva, eres tú, la novia, quién decide el color tanto de su vestido como de sus complementos nupciales el día de su boda, puesto que la moda lo que realmente impone es que elijas el color que prefieras para ese día tan especial.

Y ¿por qué no? Un vestido de novia ¿a todo color?